Cae una banda que
atracaba a narcos simulando ser agentes para robar droga y dinero.
Una investigación
iniciada en La Vila Joiosa tras un desembarco de hachís concluye con 11
detenidos en València, Cuenca y Pontevedra y tres agentes heridos de bala por
uno de los apresados. Fuente Diario Información .P. Cerrada 16.05.2017 | 11:35
Cae una banda armada
que atracaba a narcos simulando ser agentes para robar droga y dinero.
Una investigación
dirigida por un juzgado de La Vila Joiosa ha permitido desarticular en Valencia, Cuenca y Pontevedra una
peligrosa banda armada que se dedicaba a atracar a narcotraficantes para robarles droga y dinero y cuyos miembros
se hacían pasar por miembros de las Fuerzas de Seguridad.
La operación,
realizada por la Policía Nacional, la Guardia Civil y el Servicio de Vigilancia
Aduanera de la Agencia Tributaria de Alicante, se ha saldado con la detención
de once personas, entre ellas un narco de Turís (Valencia) que iba a ser
asaltado por la banda y fue detenido junto a su pareja tras recibir a tiros a los agentes, tres de los cuales resultaron
heridos por los disparos. Este arrestado estaba reclamado por la Audiencia
Nacional por tráfico de drogas y se enfrenta a 14 años de prisión por varios
delitos contra la salud pública.
La operación fue
presentada ayer en Alicante por el delegado del Gobierno en la Comunidad
Valenciana, Juan Carlos Moragues,
quien aseguró que la banda apresada era «muy violenta y peligrosa». Acompañado por los máximos responsables de
la Guardia Civil, Policía Nacional y Aduanas de Alicante, Moragues felicitó a
las Fuerzas de Seguridad por la operación, en la que los agentes se han
incautado de cinco pistolas del calibre 9 mm, una carabina del calibre 22, una
escopeta con los cañones recortados, gran cantidad de munición, 150.000 euros y
más de 8.000 libras esterlinas.
Asimismo, se han
incautado de un kilo y medio de cocaína, 25 kilos de hachís, chalecos antibala,
placas falsas de las Fuerzas de Seguridad y Defensa, una moto y diez turismos
de alta gama, además de desmantelar un cultivo hidropónico de marihuana.
La investigación
supervisada por el juzgado de Instrucción número 3 de La Vila Joiosa se inició
hace dos años tras la intervención de un alijo de hachís. Las pesquisas
desvelaron la existencia de una banda de narcotraficantes asentada en las
provincias de Pontevedra y Valencia y que estaba integrada por algunos miembros
que se dedicaban a buscar a traficantes para atracarles y robarles
droga y dinero.
Los agentes detectaron
el traslado de varios miembros del grupo a la localidad valenciana de Turís,
donde habían localizado una posible víctima de sus asaltos. Los sospechosos
comenzaron a vigilar a su víctimas para averiguar su modo de vida con el
objetivo de elegir el momento oportuno para atracarle. Para ello disponían de
cámaras de videograbación, sistemas electrónicos y dispositivos de localización
GPS.
La banda ya estaba
ultimado el asalto al vecino de Turís, pero los investigadores de la Policía y
de la Guardia Civil estaban al tanto y establecieron un dispositivo para
proteger a la víctima porque el grupo planeaba cometer el robo sin dejar rastro
alguno.
Así, el pasado 4 de
mayo por la tarde se realizaron las dos primeras detenciones al interceptar dos vehículos cuyos conductores
habían ocultado tres pistolas con abundante munición y placas falsas de
identificación de la Policía Nacional y de la Guardia Civil en un zulo situado
en una zona rural de Valencia.
Al día siguiente se
realizaron otras nueve detenciones y se practicaron cinco registros
domiciliarios en Paterna y y Turís, Carrascosa del Haro (Cuenca) y Ponteareas
(Pontevedra). En la intervención realizada en un chalet de Turís, donde vivía
el traficante que iba a ser asaltado, el ahora detenido debió despertarse
alarmado por su perros y comenzó a disparar con una pistola a los guardias
civiles que se disponían a realizar la operación de entrada. Uno de los agentes
resultó herido por un disparo en una pierna y otros dos también sufrieron
heridos por esquirlas de otras balas.
Este arrestado en
Turís no era el único fugitivo de los detenidos en la operación. Otros dos arrestados tenían en
vigor reclamaciones de la Audiencia Nacional por narcotráfico.
El cabecilla de la
banda desarticulada residía en Ponteareas y disponía en su finca de un zoo
privado con especies exóticas y animales protegidos, como águilas, halcones,
búhos reales, guacamayos y una serpiente pitón.
Según el delegado del
Gobierno, seis de los detenidos en la operación han ingresado en prisión por
orden del juzgado de La Vila.
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